Información adicional
| Peso | N/D |
|---|---|
| Dimensiones | N/D |
| Formatos | Digital, Papel |
Dos o tres labios
170 páginas
Iniciados en marzo de 1995, a su llegada a Jena para desempeñar el puesto de lector de español en la Friedrich-Schiller-Universität, los diarios del poeta Rafael-José Díaz constituyen un heterogéneo taller en el que las reflexiones, las lecturas, las experiencias y los sueños conviven sin contradicción. Ya en La otra tierra (marzo-diciembre de 1995), Las laderas del rostro (enero-marzo de 1996) y La nieve, los sepulcros (abril de 1996-septiembre de 1997), las tres entregas anteriores, publicadas hace más de una década, se mostraba un mundo decididamente frágil, de fluctuaciones constantes entre unos sitios y otros, marcado por una especie de volatilidad que, sin embargo, volvía una y otra vez a lo más íntimo, al silencio de un instante o al recogimiento de un paisaje, para interrogarse.
Dos o tres labios (Ocho cuadernos de un diario 1998-2006) va unos cuantos pasos más allá. Al principio nos encontramos al autor todavía en Jena, pero a unos pocos meses de trasladar su residencia a Leipzig, donde el diario profundizará en la errática búsqueda de lo fugaz, lo clandestino, lo innombrado. Los constantes regresos, los vaivenes propios de una vida errante, las decepciones y las inseguridades irán fundamentando un discurso cada vez más permeable a la extrañeza. Las enseñanzas se transformarán en inseguridad y los aprendizajes lo serán sobre todo de la importancia de desaprender todo. En los cuadernos posteriores, el autor se repensará a sí mismo y trazará puentes entre la memoria y la percepción, delineará encuentros, narrará episodios, someterá, de algún modo, el relato de su vida al principio de incertidumbre.
Le recomendamos …
Alejo Carpentier: Un siglo entre luces
De Pernambuco a Salamanca
Árboles genealógicos de la Cuba española
Calipso eclipsada. El teatro de Cervantes
Cuba, tres exilios. Memorias indóciles
Como un motor de avión: Biografía literaria de Enrique Jardiel Poncela
Cuba Cronología. Cinco siglos de historia, política y cultura
Cartas de Severo Sarduy
Dos patrias en el corazón
Bécquer en Martí y en otros poetas hispanoamericanos finiseculares
Diálogos culturales en la literatura iberoamericana
Caballero Bonald y Quiñones: viaje literario por Andalucía
Cartas desde una soledad
Cómo leer a Delmira Agustini: algunas claves críticas
Cartas a Eloísa y otra correspondencia
Diario íntimo de la revolución española
Actualidad y vigencia del Barroco
Camino de perfección
Cuentos, ensayos, teatro y testimonios selectos
Amado Nervo y las lectoras del Modernismo
170 páginas
Iniciados en marzo de 1995, a su llegada a Jena para desempeñar el puesto de lector de español en la Friedrich-Schiller-Universität, los diarios del poeta Rafael-José Díaz constituyen un heterogéneo taller en el que las reflexiones, las lecturas, las experiencias y los sueños conviven sin contradicción. Ya en La otra tierra (marzo-diciembre de 1995), Las laderas del rostro (enero-marzo de 1996) y La nieve, los sepulcros (abril de 1996-septiembre de 1997), las tres entregas anteriores, publicadas hace más de una década, se mostraba un mundo decididamente frágil, de fluctuaciones constantes entre unos sitios y otros, marcado por una especie de volatilidad que, sin embargo, volvía una y otra vez a lo más íntimo, al silencio de un instante o al recogimiento de un paisaje, para interrogarse.
Dos o tres labios (Ocho cuadernos de un diario 1998-2006) va unos cuantos pasos más allá. Al principio nos encontramos al autor todavía en Jena, pero a unos pocos meses de trasladar su residencia a Leipzig, donde el diario profundizará en la errática búsqueda de lo fugaz, lo clandestino, lo innombrado. Los constantes regresos, los vaivenes propios de una vida errante, las decepciones y las inseguridades irán fundamentando un discurso cada vez más permeable a la extrañeza. Las enseñanzas se transformarán en inseguridad y los aprendizajes lo serán sobre todo de la importancia de desaprender todo. En los cuadernos posteriores, el autor se repensará a sí mismo y trazará puentes entre la memoria y la percepción, delineará encuentros, narrará episodios, someterá, de algún modo, el relato de su vida al principio de incertidumbre.
Dos o tres labios
| Peso | N/D |
|---|---|
| Dimensiones | N/D |
| Formatos | Digital, Papel |
Le recomendamos …
Caballero Bonald y Quiñones: viaje literario por Andalucía
Cómo leer a Delmira Agustini: algunas claves críticas
Actualidad y vigencia del Barroco
Cartas a Eloísa y otra correspondencia
Calipso eclipsada. El teatro de Cervantes
Amado Nervo y las lectoras del Modernismo
Cuba Cronología. Cinco siglos de historia, política y cultura
Cuba, tres exilios. Memorias indóciles







