Emerson como educador
242 páginas
El título de este libro es una versión del título de otro libro, Schopenhauer como educador, de Friedrich Nietzsche. Aunque para entender a Nietzsche habría que admitir sin reservas la influencia de Emerson, contribuir a esa interpretación no es el motivo que ha animado las páginas que siguen. La influencia de Emerson en general –a pesar de los grandes ejemplos de Thoreau, del propio Nietzsche, de Harold Bloom o de Stanley Cavell– sigue siendo un misterio. Cada uno de los ensayos de este libro ofrece un aspecto de ese misterio, no la clave. El misterio o la dificultad en cuestión tal vez residan en lo que Emerson llamó las “enseñanzas tardías”. Una lectura comparada de algunos autores más o menos excéntricos podría mejorar nuestra educación convencional. El carácter que le demos a la convencionalidad de nuestras instituciones educativas es menos importante que el hecho de que tienden casi fatalmente a la conformidad. La confianza en sí mismo que Emerson adoptó como aversión a esa conformidad era, sin embargo, una exigencia de la comunidad: de lo que la comunidad exige a cada uno de sus miembros y de lo que cada uno de sus miembros exige a la comunidad.
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Emerson como educador
| Peso | 176 g |
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