Jack London nació el 12 de enero de 1876 en San Francisco. Se cree que fue hijo de William Chaney, periodista, abogado y astrólogo ambulante al que no llegó a conocer, y de Flora Wellman, mujer neurótica aficionada al espiritismo, que se casó con John London meses después de su nacimiento. El niño fue criado por una antigua esclava. Durante su infancia, después de algunos fracasos como granjeros, los London se asentaron en Oakland. Alternó la escuela con el reparto de periódicos, y de ladrón de ostras pasará a colaborar con la patrulla encargada de proteger los viveros que antes había saqueado.

Se inició como escritor a los diecisiete años en un concurso periodístico, donde consiguió el primer premio con la descripción de un tifón, una experiencia vivida durante su labor de marinero en el Sophie Sutherland.

Entre 1897 y 1898, el joven autor realizó viajes a Alaska atraído por la fiebre del oro, experiencia en que se fundamentan algunos de sus libros, como Colmillo blanco. Antes había sido marino, pescador y contrabandista. Regresó a San Francisco, donde publicó en 1900 una colección de relatos titulada El hijo del lobo,con la que consiguió un gran éxito y alcanzó notoriedad. Ha sido traducido a numerosas lenguas.

Sus novelas fueron llevadas al cine en muchas ocasiones. Entre las más destacadas están La llamada de la selva (1903), El lobo de mar (1904), Colmillo Blanco (1907) y Martin Eden (1909).

Jack London se suicidó el 22 de noviembre de 1916 en Glen Ellen (California, EE.UU.) a la edad de 40 años; y tanta era su popularidad que los periódicos europeos dedicaron más espacio a la noticia de su muerte que a la del emperador Francisco José de Austria, fallecido el día anterior.