A  Manuel Milá y Fontanalls (1818-1884) se le considera uno de los introductores del Romanticismo en Cataluña y es una figura preeminente de la Renaixença literaria. Sus trabajos sobre Historia, Literatura y Filología, de un gran rigor intelectual, abren el camino a los métodos modernos de investigación y crean una escuela que llega hasta nuestros días. Destacan Observaciones sobre la poesía popular (1853), De los trovadores en España (1861), Ressenya històrica i crítica dels antics poetes catalans (1865) y Estudios de lengua catalana (1875), entre muchos otros títulos.

Uno de sus discípulos más destacados, Menéndez y Pelayo, se encarga de la publicación de sus obras completas, una recopilación de buena parte de sus ensayos, artículos y discursos.