Anderson Benavides Prado nació en Puente Nacional, Colombia, en el año 1983. Es el séptimo en una familia de ocho hijos. A su trabajo, y al incansable espíritu de superación de su madre, les debe haber pasado una infancia y una adolescencia modestas, pero bajo un techo y sin un solo momento de hambre. Se le reconoció, durante todos sus años de colegio, como un estudiante de notable entendimiento, a tal extremo que, algo cansado –o muy convencido– de ello, renunció a seguir el camino por el que continuó el resto.

Desde entonces se sumergió en el estudio de la obra filosófico-poética de latinos y griegos, de la tragedia inglesa, de la comedia francesa, de la novela rusa, de la aforística alemana y, en general, de todo cuanto tuviese que ver con las más altas manifestaciones artísticas de la civilización humana. Lleva quince años en eso y, hasta el momento, no ha encontrado razones que lo inviten o lo obliguen a dejar de hacerlo. Una palabra sobre Isaura (Ápeiron ediciones, 2017) es su primer libro.