El primer Padura. Reseña de Fiebre de caballos en ABC Cultural

A la escasa lista de ficciones que protagoniza un adolescente en vías de asaltar el mundo adulto, tanto en la nómina de la literatura cubana como en la hispanoamericana, viene a sumarse esta obra inaugural de Leonardo Padura. Sólo por ese atrevimiento ya merecería nuestra atención.

La Cuba de Fiebre de caballos tiene un halo de semejanza con Cabrera Infante y Reynaldo Arenas. Son textos que descubren en primer plano un conflicto individual, sin olvidar las limitaciones que imponen las sociedades en que se originan y que  son la misma en los tres escritores: una Cuba escindida, introvertida y frustrada.

Es tentador tratar de identificar a este Leonardo Padura en ciernes con el autor de la obra más reciente. Podría decirse que el protagonista de
esta novela es Mario Conde adolescente, con el mismo interés por interpretar el universo al que pertenece. En Fiebre de caballos nos encontramos al joven inquieto que trata de alcanzar todas sus ilusiones, sin conseguirlo.

El paso del tiempo y más de media docena de novelas lo transformarán en el héroe resignado y escéptico que ve la vida -y no sólo la realidad nacional cubana- como un mal crónico.

ARTURO GARCÍA RAMOS

Fiebre de caballos